La torre hecha cinco veces

    Muchos edificios han ido evolucionando a lo largo de los siglos, cambiando totalmente su estética y función.

  Cuando un territorio es peligroso se erigen fortalezas defensivas para protegerse. En algunas ocasiones estas son destruidas y necesitan ser rehechas, siendo un ejemplo el torreón de Gando ubicado en Telde, dentro la isla de Gran Canaria.

  El origen de este lugar está en 1360 cuando dos barcos llenoos de mallorquines y aragoneses fueron enviados por el infante don Luis de la Cerda con la intención de evangelizar la isla. Una vez allí erigieron un fortín donde vivir y realizar su función pero en una internada los habitantes los atacaron, matando a la mayoría y capturando a otros. Tras ello derribaron la obra.

  En 1457 Diego de Herrera, señor de Lanzarote, decide edificar una nueva torre denominada casa de oración. Allí mando a una guarnición bajo mando del alcaide a Pedro Chemida. La intención era, mediante engaño de concordia, conseguir la sumisión de los reyes aborígenes pero al final lo hicieron atacando a la población y secuestrando mujeres. Finalmente estos se cansan y prenden fuego a la torre.

  Dos años más tarde, 1459, Portugal inició maniobras para tomar la isla, por ello se erige una tercera torre para defenderse. Esto resulta inútil porque el comandante portugués la consigue tomar Diogo da Silva y la mantuvo hasta 1462 cuando es obligado devolverla. En ese momento vuelve a ser utilizada por los españoles y dura hasta 1554. Ese año el gobernador Rodrigo Manrique la tira y erige una cuarta más moderna para protección contra los piratas.

  Por último, en 1741, del general Andrés Bonito De Pignatelli ordena derribarlla y le pide a los ingenieros de la Riviere y la Pierre sustituirla por una nueva. Esta es la que se ve actualmente.

  Se trata de una torre circular echa de mampostería, con un pilar central del que arrancan ocho arcos. Además posee una bóveda de sillería, dos ventanas y un aljibe rectangular. Su interior consta de dos pisos; en el primero estaban la cisterna y el almacén de pólvora y víveres y en el segundo dormîa la tropa y daba paso a la terraza.

  Actualmente presenta un buenestado, pertenece al Ejército del Aire, alberga el Museo de la Aeronáutica Canaria y es Bien de Interés Cultural.