Con el paso del tiempo muchas edificaciones han cambiado su función para adaptarse a los nuevos tiempos. Un ejemplo de ello es la Casa del Doncel o palacio de los Marqueses de Bédmar ubicada en la guadalajareña localidad de Sigüenza.
La vida de este edificio comienza en el siglo XIII para funcionar como resistencia nobiliaria, y de hecho se piensa que un siglo más tarde vivió en ella Martín Vázquez de Arce, el conocido como el Doncel de Sigüenza, de ahí el nombre de la casa. Sin embargo, este primer edificio se demolió a finales del siglo XV y en su solar se ergió uno nuevo cuyas obras culminaron a principios del XVI.
Lo que aquí se ve es una casa-torre gótica, de tres noches niveles, asentada en tres crujías y construida en piedra sillar de caliza y arenisca. La fachada está dividida en tres partes: la baja tiene la puerta en arco de medio punto y los escudos de los Vázquez de Arce y de los Sosa, la segunda posee una ventana mayor en el centro y otra menor en la derecha decorada con el escudo de los Vázquez de Arce, y la superior contiene un ventanal coronado por almenas.
Tras su finalización sirvió como residencia para los Vázquez de Arce y Sosa y los Marqueses de Bédmar. Esto hizo que su interior se alterará pero más se hizo para los diversos usos que luego tuvo, dándole una estructura laberíntica.
Aunque su reestructuración más fuerte sucedió en 1997 cuando la Universidad de Alcalá la adqurió para instalar el Centro o Sede de Estudios Saguntinos.
Actualmente sigue en manos de la universidad la cual la utiliza como museo, sala de lectura y aulario para cursos de verano. Además en el piso superior está el Archivo Histórico Municipal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario