jueves, 28 de mayo de 2020

Amón e Isis en Madrid

  En la montaña del Príncipe Pío, donde aquel 3 de mayo se fusilaron a los sublevados del 2 de mayo se alza ahora un majestuoso y antiguo templo egipcio.
  El templo de Debod fue construido en la localidad egipcia de Debod, Nubia, en el siglo II A.C. por el rey de Meroe, Adijalamani, dedicándoselo al culto de Amón y de Isis. En años posteriores los reyes Ptolemaicos le fueron añadiendo nuevas estancias. En cambio su finalización se debe a los emperadores romanos Augusto y Tiberio (y quizá Adriano) tras la anexión de Egipto a Roma. 
  Ya en el siglo VI y tras la conversión de Nubia al cristianismo, el templo fue clausurado y deshabitado. Desde entonces numerosos exploradores han asistido a Debod y a contemplar sus templos como curiosidad y para estudiar como eran las construcciones antiguas y los ritos y creencias religiosas que allí se daban, siendo su primera descripción exacta la que hizo Johann Ludwig Burckhardt en 1813 cuando fue enviado por Napoleón a explorar la zona.
  La construcción de la primera presa de Asuán en 1907 ya empezó a causar deterioros en los templos ya que les hacía permanecer unos siete meses bajo las aguas del bajo Nilo.
  Por este motivo y tras la necesidad de construir una segunda presa en 1961 se decide que hay que salvar los templos, por ello desde 1960 varios países colaboraron en ese propósito. En España se crea el Comité Español dirigido por el profesor y arqueólogo Martín Almagro Basch.
  Para ello excavaron la zona arqueológica y desmontaron los templos para depositarlos en la isla Elefantina hasta saber que hacer con ellos.
  Ya en 1970 y en agradecimiento por la ayuda, el gobierno de Egipto donó el templo a España. Primero fue trasladado a Alejandría y de allí a Valencia en barco piedra a piedra. Su destino final fue Madrid.
  Su reconstrucción no fue nada fácil. En la base se utilizó la anastilosis, es decir usar los elementos originales con añadiduras necesarias para su sujeción pero de color distinto para diferenciar antiguo y nuevo.
  Los bloques exteriores fueron tratados químicamente y reforzados. Su interior fue climatizado para parecerse al de su emplazamiento. A su alrededor se construye un estanque para hacerlo pasar por el Nilo. Finalmente es inaugurado en 1972.
  El edificio se estructura en: 
  -Capilla de Adijalamani o de los relieves, es la parte más antigua y decorada con escenas que recuerdan al rey. 
  -Mammisi el lugar donde la diosa venerada daba a luz.
  -Vestíbulo o pronaos hipóstilo sala decorada por Augusto y Tiberio pero bastante deteriorada por un terremoto del siglo XIX.
  -Antesala del naos sala que distribuye el templo en tres capillas.
  -Sala de los naoi, o capilla central de cabecera de época ptolemaica y dedicada a Isis y Amón.
  -Corredor sur pasillo que en su día fue exterior. En él se ubica un reloj solar.
  -Capilla osiriaca: era la capilla-relicario del dios Osiris.
  -Terraza se hacían rituales al sol (dios Amón en su fusión con el dios Ra), siendo el más importante el Ritual de Año Nuevo.
  -Capillas de la cabecera se creen que dedicadas a Osiris y Mahesa.
  -Uabet: era el lugar donde los sacerdotes se purificaban antes de los ritos.
  -Criptas: pequeñas capillas donde se guardaban tesoros, reliquias o perfumes.
  En su interior además se guardan dos bloques. Bloque de Apedemak, se trata de un bloque que cuenta la historia del "amado de Apedemak"  y el bloque del león y el úreo, por las figuras representadas.
  En su exterior hay dos puertas aunque muy probablemente en su época eran tres.
  El monumento, aunque ha sido restaurado, no tiene un estado de conservación bueno ya que debería estar bajo techo porque la lluvia, la climatología y la contaminación esta dañando la piedra. Por ello, y tras varias advertencias internacionales, se ha decidido proteger todo el templo.
  Desde su llegada a Madrid es el edificio más antiguo de la ciudad y además se trajo con él un misterioso gato que por la noche vigila a los visitantes del parque. Este felino es el dios Amón que vigila una de sus moradas.
  Egipto regaló otros tres templos; Dendur a Estados Unidos, Ellesiya a Italia y Taffa a Países Bajos. Debod es el más grande y valioso de todos, pero también es el menos cuidado al no estar bajo cubierta. Solo queda esperar que el ayuntamiento cumpla con la promesa de protegerlo como es debido después de tantos años sin que nadie hiciera caso.
  
Maqueta del templo original
  
Foto Jiuguang Wang





  

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