El mausoleo romano aragonés

   Mucho tiempo pasaron los romanos en Hispania y debido a ello numerosas construcciones han llegado hasta nuestros días.

  En la localidad de Fabara situada en la provincia de Zaragoza se encuentra una de las construcciones romanas mejor conservadas de la península el mausoleo de Fabara de Lucio Emilio Lupo el cual data del siglo II y se construyó para albergar los restos Lucius Aemili Lupi quien seguramente fuera miembro de una familia bastante importante de la época.

  Lo que aquí se halla es un edificio construido por arenisca sin mortero el cual imita a la perfección a los templos romanos y cuyos bloques están unidos con grapas de hierro, además posee planta basilical de 7,40 x 6,06 m orientada al este. En él encontramos cuatro fachadas estando solo abierta la principal la cual tiene un pórtico tetrástilo de columnas de toscanas sobre las que se sujeta un entablamento jónico que recorre las cuatro paredes. Además está coronado por un frontón del cual solo se conserva el tímpano con el nombre del difunto inscrito en él. El resto de las fachadas tienen una moldura sobre la que se apoyan dos pilastras toscanas estriadas. Todo ello rematado por un tejado a dos aguas ya desaparecido.

  Su decoración exterior es bastante sobria salvo en el friso del entablamento siendo diferente en cada lado: en la trasera hay roleos hecho con hojas de acanto con rosetas interiores, en la sur hay siete águilas cuyos picos sujetan guirnaldas florales, en la norte hay columnas que prenden guirnaldas estrechas y en la principal habría una inscripción en bronce pero solo quedan sus agujeros.

  En su interior hallamos dos salas, la primera era la cella o naos y servía para hacer los sacrificios y honores al muerto cuyos restos reposarían en la segunda conocida como conditorium que estaba bajo tierra.

  En cuanto su historia se sabe que el monumento pasó bastante desapercibido hasta que en 1874 la Real Academia de la Historia puso en sobre aviso a las administraciones pero no fue hasta 1942 cuando pasa a manos del Estado. 

  Actualmente esta joya romana es monumento Histórico Artístico (1931) y debido a su gran estado de conservación se considera el sepulcro romano mejor preservado de España.