martes, 13 de abril de 2021

La capilla sixtina extremeña

   Puro arte encontramos en las múltiples iglesias que hay en España pero hay algunas que están tan sumamente decoradas que se pueden comparar con la Capilla Sixtina.

  En Badajoz existe una pequeña localidad que se llama Fuente del Arco cuyo nombre puede provenir de una antigua fuente, restaurada en el año 2000, que contiene la inscripción HINC INCIPIT EXTREMA HORA (Aquí empieza Extremadura). Un pueblecito que pertenece a la comarca de Campiña Sur y al partido judicial de Llerena y cuyas casas encaladas están rodeadas de huertos y olivares en torno a una iglesia advocada a la Asunción de Nuestra Señora, Pero sin duda lo que más destaca de este lugar no está en su núcleo urbano sino a unos 7 kilómetros de distancia, el Santuario de Nuestra Señora del Ara.

  Se trata de una ermita construida en las proximidades de Sierra Morena, en un lugar de gran presencia de restos romanos, que fue mandada construir por el prior de la Orden de Santiago García Ramírez en 1494, seguramente sobre un templo precristiano anterior. En un principio la iglesia solo contaba con una nave cubierta con bóveda de cañón completada con algunas casas y un molino que servían como morada de los habitantes. En años posteriores ya se añadió una espadaña de dos cuerpos con dos arcos de medio punto abajo y uno arriba. Además se construye un camarín. 

  Su exterior realmente no llama demasiado la atención salvo una arquería de estilo mudéjar pero lo importante está en su interior. Una vez que atravesamos su puerta nos encontramos con una nave completamente decorada con 26 frescos en los que se relatan, no de manera cronológica, textos sagrados como el Génesis, el diluvio universal o el sacrificio de Isaac. Todos situados en una cuadrícula decorada con flores, alas amarillas y figuras humanas. Los cuadros están datados entre el siglo XIV y el XVIII pero se desconocen sus autores y gracias a la linterna que les ilumina se pueden observar a la perfección cada detalle. Por último destaca el retablo mayor barroco con un camarín que contiene la imagen de la Virgen y a cuyos pies se sitúan la princesa Erminda y su padre el rey Jayón, protagonistas de una leyenda del siglo XIII en la que se dice que estando por la zona Erminda miró hacia una encina y justo en ese momento se le apareció la Virgen, por ello abandonaron su Fe musulmana por la cristiana y construyeron una capilla donde ahora está la ermita.

  Aquí lo que hay es una autentica joya escondida que gracias a su gran decoración se ha ganado el sobrenombre de la Capilla Sixtina extremeña.


No hay comentarios:

Publicar un comentario