En cualquier ciudad puede haber edificios muy curiosos salidos de la imaginación de una persona y que pueden ser una maravilla.
A veces cuando visitamos alguna localidad podemos toparnos con edificios de una estética peculiar como pasa en la leonesa población de Valencia de Don Juan donde existe una casa sacada totalmente de la imaginación de un hombre y que parece totalmente sacada de un comic de superhéroes, el Edificio Centinela.
La historia de esta construcción nos lleva a 1990 cuando el albañil y constructor Santiago Nava decidió levantar un edificio que fuera diferente a todo lo que llevaba haciendo durante un largo periodo de tiempo y por eso adquirió un solar donde poder emplazarlo. El 20 de septiembre de ese año comienza las obras de un edificio que no deja indiferente a nadie y que dieron como resultado un edificio de cinco niveles en los que se mezclan una especie de estilo modernista con estética de comic.
La parte baja, de planta paralelepípeda en forma de cuña, está destinada a locales comerciales está decorada con una especie de mosaico muy inspirada en las columnas que sujetan los viaductos del Parque Güell. Sobre ella ya aparecen los cuatro pisos dedicados a viviendas construidos con piedra de color gris-violeta y granate, en los cuales lo que más destaca son sus veintinueve ventanales todos distintos entre sí en los que ya se muestran formas parecidas a los símbolos que usan los héroes de Marvel o DC. Todo ello se remata en un tejado que trae recuerdos góticos sobre todo en las dos torres cilíndricas que se unen a otra a través de unas pasarelas metálicas.
Estas torres se coronan con cuatro especies de gárgolas vigías cada una con un significado. Una cobra erguida amenazante con lengua bífida que sería quien vigilaría desde tierra, un águila con las alas semiabiertas en actitud intimidante que guardaría los aires y un soldado que les ordena. Estas gárgolas están creadas por Manuel Chiches y a ellas se les une un Arcángel San Miguel el cual como comandante de los ejércitos celestiales se enfrentaría al mal.
Su interior es todavía más surrealista ya que está formado por con cinco grandes viviendas cuyas formas, organización y ventanas son todas irregulares y diferentes y están construidas con una mezcla de materiales muy ecléctica como barro, canto o hormigón o madera.
Todo el edificio es una mezcla de cosas que despiertan la imaginación de todo aquel que lo ve y de hecho ya se le han dado varios motes como el de la Casa de Batman debido al águila. Eso sí el edificio sigue sin terminar ya que Santiago sigue construyendo según su ingenio se lo va pidiendo.
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