sábado, 27 de agosto de 2022

El castillo que Sancho arrebató a los Banu

   Los castillos se encuentran en multitud de localidades gracias al pasado medieval de la Península y sus guerras.

  Los castillos eran una de las construcciones más comunes de la Edad Media es por ello que actualmente disfrutamos de gran cantidad de ellos en distintos estados de conservación y un ejemplo es el castillo de San Esteban de Deyo o Castillo de Monjardín ubicado en la navarra localidad de Villamayor de Monjardín.

  El origen de este castillo data del siglo XVIII cuando la poderosa familias musulmana de los Banu Qasi, quienes regían su territorio desde Tutila (Tudela), crearon esta fortaleza en lo alto de un altozano de 890 m para poder vigilar parte de sus propiedades. Que estuviera a esa altura hace que fuera bastante estratégico es por ello que primero Carlomagno y posteriormente el Emir qurtubi Abd al-Rahman I lo quisieran tomar pero no pudieron sin embrago en el año 908 el rey Sancho Garcés I sí lo consiguió y lo incluyó en el Reino de Pamplona dándole el nombre de San Esteban de Deyo, fue en el siglo XII cuando se le empieza a nombrar como Monjardín. Gracias a esto consigue tener una nueva frontera y una puerta para situar sus tropas contra los musulmanes.

  Durante el resto de su vida fue una constante moneda de cambio entre la Corona y la Iglesia hasta que finalmente fue abandonado en el siglo XIX aunque fue utilizado durante las Guerras Carlista de 1836 a 1840 y de 1872 a 1876, sobre todo en la batalla de Montejurra. Esto hace que prácticamente quede destruido.

  Debido a estas guerras del primitivo castillo solo quedan en pie los muros de arenisca que daban paso a una fortaleza de la que aún se ven restos del aljibe en el interior de una casa abovedada y parte de la Torre del Homenaje. Lo que sí se mantiene es la ermita de San Esteban de Deyo o Santa Cruz de Monjardín la cual está vinculada al rey Sancho Garcés I aunque fue construida en tiempos posteriores más concretamente en el siglo XIII. En cuanto a su segunda advocación se debe a la cruz procesional que se dice que pertenecía a Sancho ya que según la leyenda aquí habría sido inhumado el rey. Además conserva una campana donada en 1965 por la peña sanferminera "La Saeta".

  Actualmente el castillo está bastante desfigurado de como era originalmente pero sigue conservando el encanto de su historia lo que le ha permitido ser Bien de Interés Cultural.



No hay comentarios:

Publicar un comentario