jueves, 27 de octubre de 2022

El hospital abandonado de la sierra de Madrid

   Lugares encantados hay por todas partes y siguen siendo un foco de atracción para los amantes de lo paranormal.

  De todas las construcciones que se dicen que están encantadas los hospitales quizá sean los más especiales debido a la cantidad de gente que ha muerto en su interior. De estos podemos encontrar muchos ejemplos y uno de ellos es el Hospital del Santo Ángel también conocido como el Sanatorio de la Barranca y ubicado en plena sierra de Guadarrama, dentro del término municipal de la madrileña localidad de Navacerrada.

  El origen de este lugar data de 1941 cuando en la sierra se instalaron varios hospitales para tratar enfermedades como tuberculosis, la lepra, la polio, la fibrosis y el cáncer de pulmón ya que el aire de la sierra podría hacer bien a estos pacientes. Este en concreto se creó para tuberculosos, ocupa unos unos 3.000 metros cuadrados y es el único que sigue en pie. Para su construcción se utilizó la arquitectura típica hospitalaria por ello se crearon dos grandes alas donde albergarían a los enfermos a las que se le adosaron edificios para otro tipo de acciones y sótanos. 

  Con el tiempo y el avance de la medicina las infecciones pulmonares bajaron por lo que el hospital perdió su función para tomar otra que no tenía nada que ver con estas dolencias ya que se convirtió en un centro psiquiátrico que estuvo en funcionamiento hasta 1995 cuando se cerró y abandonó por completo. Esto ha hecho que su estado sea una total ruina, sobre todo en su interior, pero sus amplias dimensiones lo hacen un edificio bastante aprovechable para usos recreativos pero no hay ninguna empresa que se atreva a llevar nada a cabo en él y que seguramente sea por las leyendas que sobre él se cuentan.

  Para todo aquel que lo ve desde lejos observará que tiene una apariencia totalmente de una casa encantada y si ya se entra a su interior lo podrá corroborar ya que de sus ocho pisos apenas quedan los tabiques y los suelos. Pues bien, a pesar de lo inhabitable del lugar los vecinos de la zona siempre han contado que se ven luces que caminan por sus pasillos o que los fantasmas de los antiguos pacientes se aparecen en ellos. También comentas que desde él se oyen gritos desgarradores de los enfermos que en él habitaron. Pero todo empeoró cuando en su interior se empezaron a hacer ceremonias satánicas, aquelarres y ritos para contactar con los muertos, como así lo atestiguan los restos de velas y pintadas, ya que se considera que este lugar es una puerta al más allá. También numerosos investigadores han acudido al hospital y han descrito que han visto apariciones y han captado psicofonías.

  Actualmente sigue en su ubicación original mostrando un aspecto espectral y tenebroso que nadie se ha atrevido a remediar pero que también atrae a multitud de amantes de lo paranormal.



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