Iglesias hay en cualquier ciudad española debido a la gran tradición cristiana que existe desde hace siglos.
Normalmente cuando los reinos cristianos tomaban una ciudad que estaba en manos musulmanas levantaban iglesias donde antes estaban las mezquitas. Ejemplos de esto hay muchos y uno de ellos es la iglesia de Santo Tomé o de Santo Tomás Apóstol de Toledo.
El 6 de mayo de 1085 las tropas del rey Alfonso VI de León entraron en Tulaytula y expulsaron definitivamente a Yahya ibn Ismaíl ibn Yahya al-Qádir bi-L-lah que en ese momento era rey de la taifa. Una vez hecho esto Alfonso ordenó el derrumbe de las mezquitas de la ciudad y erigir sobre ellas una serie de iglesias. Pues bien la de Santo Tomé se levantó a principios del XII para sustituir a una mezquita del siglos XI.
Para el siglo XIV esta iglesia estaba bastante deteriorada y amenazaba con venirse abajo es por ello que Gonzalo Ruiz de Toledo, notario mayor de Castilla y señor de la villa de Orgaz, quien ese momento ostentaba el cargo de alcalde decide tirarla y reedificarla de nuevo dándole el aspecto que conserva actualmente. De esta manera se ve un exterior bastante sobrio y enmarcado dentro del mudéjar toledano en el que destaca una torre campanario cuadrada que realmente es el antiguo alminar de la mezquita aunque reconstruido en el siglo XIV. Esta torre es de planta cuadrada y se levantó con mampostería y ladrillo con cerámica vidriada incrustada como decoración mientras que en sus dos cuerpos superiores se abren vanos de dos y tres ventanas. Como este campanario es doble entre los dos grupos de campanas hay un friso de arquería ciega con arcos lobulados separados por pequeñas columnas de barro cocido vidriado. En este segundo piso también hay una ventana geminada y junto a ella una placa-nicho visigoda hecha en mármol blanco que muestra una venera y una cruz patada ornamentada con las letras alfa y omega. Todo culmina con un remata a modo de cordón en forma de dientes de sierra.
De ahí se pasa a un interior de tres naves con crucero, cubiertas por bóvedas de cañón y ábside poligonal y tres capillas. La capilla Mayor se erigió con mezcla de mudéjar y gótico flamígero y para ello el señor de Orgaz derribó la antigua cabecera y elevó la cúpula central en forma de estrella de ocho puntas con los nervios pintados. En el lado del evangelio es donde está la puerta de acceso a la torre.
Pero sin duda lo más conocido de esta iglesia es la pintura de El Greco "El entierro del conde de Orgaz" (1586-1588) ordenada por el párroco de la iglesia Andrés Núñez de Toledo cuando arregló la capilla de la Concepción, el lugar donde fue enterrado Gonzalo Ruiz de Toledo. Cuando él murió en 1323 pidió ser enterrado en la capilla más humilde pero el párroco en 1586 quiso mejorarla y para ello la hizo cuadrada y la cubrió con una bóveda de media esfera además de adosar en los muros cuatro arcos de medio punto. Luego colocó una nueva placa de mármol y el cuadro de El Greco pare explicar el milagro, y es que se dice que en el entierro de Gonzalo aparecieron san Esteban y san Agustín para depositar su cuerpo en la sepultura.
Actualmente es una de las iglesias más importante de Toledo y conserva un gran estado por lo que ha sido nombrada Bien de interés cultural.
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