jueves, 5 de octubre de 2023

La casa del hechicero

  Muchos lugares con leyenda se pueden encontrar en los pueblos de España gracias a los dueños que tuvieron.

  En casi todas las localidades españolas existe alguna construcción que esconde leyendas debido a los dueños que en ella habitaron y un ejemplo es la Casona de Espina, con su Torre y Portalada o palacio de La Bárcena ubicado en el cántabro municipio de Ampuero
 
  El origen de esta edificación está en el siglo XIV cuando los Espina llegaron hasta Ampuero. Una vez allí ordenaron levantar una casa que les sirviera como cobijo y lugar para seguir con sus negocios ya que parte de la familia en tiempos posteriores se dedicaron al comercio marítimo, sobre todo Juan de Espina y Velasco y su esposa María de Mesa ya que eran los dueño en 1545 de la nao "Nuestra Señora de la Concepción" la cual mercadeaba entre Castilla y Flandes.

  Lo que aquí se ve es una portalada de piedra maciza en la cual hay dos grandes maceros u Hombrones vestidos de manera romana que flanquean el escudo de la familia y se con bolas herrerianas. Desde ella, a través de un arco de medio punto con grandes dovelas y cubos semicirculares a los lados, se accede a la torre gótica de tres niveles con arco de medio punto, ventanas rectangulares, aspilleras, una ventana con arco ojival remarcado con un sogueado, y un desmoche que se remató en tejado a dos aguas. Por último está la vivienda de dos pisos formada por cubos semicilíndricos en los esquinales, puerta y dos ventanas adinteladas, imposta lisa, balcón corrido con antepecho rectangular decorado con un escudo y una moldura lisa que sujeta el tejado. Todo esto está muy restaurado debido a un gran incendio en el siglo XVIII que destruyó gran parte del edificio.

  Pero este lugar también es conocido por uno de sus habitantes, don Juan de Espina, un clérigo que también era bastante aficionado a las ciencias ocultas y a coleccionar objetos de índole misteriosa. Este hombre tiene una biografía muy curiosa y enigmática que ya contaré en próximas entradas, es él el que aporta leyenda a la casona porque nadie sabe realmente que hacía en su interior.
 
  Actualmente presenta un gran estado, está catalogada como Bien de Interés Cultural y acoge el museo Torre Mágica de Espina dedicado a la familia Espina, sobre todo a Juan.





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