La nobleza solía levantarse casas en multitud de lugares, así cuando viajaban no necesitaban alojarse en hogares de conocidos o en hoteles. Muchos son los ejemplos y uno de ellos es la Casa del Duque de Almodóvar del Río (o simplemente El Duque) ubicada en la cántabra localidad de Comillas.
A mediados del siglo XIX Comillas estaba sufriendo una gran transformación gracias a la familia López Bru y otras sagas que empezaron a instalarse en la localidad. Es en ese contexto cuando Juan Manuel Sánchez y Gutiérrez de Castro y su mujer Genoveva de Hoces y Fernández de Córdoba, duques de Almodóvar del Río y Marqueses de la Puebla de los Infantes, le piden a Francisco Hernández-Rubio y Gómez que les levante un nuevo hogar. El lugar elegido fue en lo alto de la colina de Moria y la fecha de inicio 1899 y de finalización 1902.
Lo que aquí se observa es un casa ecléctica en el que se mezclan el estilo inglés con toques modernistas de impronta romántica y expresiones gotizantes. Por ello se pueden ver volúmenes dispuestos de manera asimétrica, torres con cubierta a cuatro aguas, galerías "bow-windows", aleros y adornos de madera, chimeneas de ladrillo, balcones, terrazas y soportal. De ahí se pasa a un interior totalmente organizado en estilo inglés como se demuestra en el mobiliario y la escalera que le da un toque pseudo-palaciego.
Actualmente sigue en manos privadas, y gracias a su aspecto ha sido utilizada como plató para varias películas y series.
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