La casa palacio del marqués

   La nobleza se levantó palacios en multitud de lugares para vivir en ellos, edificios que aún siguen en pie actualmente.

  No es raro que en muchas localidades se encuentren antiguos palacios que pertenecieron a nobles o instituciones ya que estos solían levantar este tipo de edificios para diferentes usos en los municipios que frecuentaban. Normalmente estos se hallan en buen estado pero otros no y eso es lo que ocurre con el palacio de Urbasa o del Marqués de Andía ubicado en la Venta de Urbasa, un lugar que pertenece al pueblo navarro de Valle de Yerri.

  A finales del siglo XVII  Juan Ramírez de Baquedano, II marqués de Andía, poseía la jurisdicción civil y criminal en los montes de Urbasa y Andía por ello el Tribunal del Real Consejo, a petición del fiscal del reino, le ordena que erija un nuevo palacio que sirviera como vivienda y cárcel. Finalmente lo construye pero ningún miembro de su familia lo habita sino que se instalan en él los caseros de los marqueses y el capellán de la capellanía-abadía.

  Para esta función lo levanta con planta rectangular articulado en cuatro cuerpos ensamblados, organizados en torno a un patio central, y con torres mochas en sus esquinas. Todo, además, se completa con un zaguán de porche abierto con arcada de piedra labrada y como única decoración un escudo de los Baquedano en estilo barroco.

  Tras los caseros y el capellán la casa se convirtió en el refugio de los viajeros de Urbasa, de pastores y ganaderos hasta que lo adquiere Juan Echávarri, un industrial maderero de Olazagutía, quien lo moderniza e instala una venta. Su último y actual propietario es la Diputación Foral de Navarra quien lo quiso convertir en hotel pero desechó la idea y con ella el edificio al completo.

  Actualmente el edificio está totalmente abandonado lo que le ha supuesto grandes daños por falta de mantenimiento y estar a merced de actos vandálicos. A esto se le suma que no tiene ningún tipo de protección oficial por lo que las autoridades se han desentendido de él haciendo que corra el riesgo de desparecer, como se demuestra en que esté incluido en la lista roja de patrimonio español en peligro de Hispania Nostra.