Cuando existe un desnivel que hay que sortear para unir dos puntos se hace obligatorio la construcción de puentes que lo permitan y un ejemplo de ello es el viaducto de San Martín de la riojana localidad de Ortigosa de Cameros.
El origen de esta pasarela está en el primer cuarto del siglo XX cuando se proyectó para unir los barrios de San Martín y San Miguel sobre las aguas del río Albercos. Finalmente se inauguró en septiembre de 1924.
Se trata de un puente de hormigón armado con una longitud de 97 metros dividos en tres tramos, dos rectos en los laterales y uno central en arco (salva la distancia de 60 m, estando su clave a 40 m de altura). Además posee dos vanos de 13 y 11 metros de luz en la orilla izquierda y otro de 11.40 a la derecha. Todo se sostiene por unos nichos excavados en la roca para cimentación y de donde parten los pilares.
Actualmente presenta un gran estado, debido en gran parte a su rehabilitación de 2023, y desde el 3 de noviembre de 2021 es Bien de Interés Cultural.
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