El tigre de Bilbao

  En los tejados de los edificios podemos encontrar grandes esculturas que da empaque a todo la construcción.

  No todas las cosas interesantes de una ciudad esta en la tierra, a veces es necesario alzar la vista para centrarnos en los tejados donde puede haber sorpresas y eso pasa con el Edificio El Tigre o del Tigre de Bilbao.

  En 1940 Jesús Muñoz Mendizábal quiso levantar un nuevo edificio en la Ribera de Deusto para albergar en su interior su empresa, Correas El Tigre. Para ello contó con Pedro Ispizua. Se trata de una construcción de muros de hormigón armado, con base en forma de "L", dos partes diferenciadas, planta baja más cinco pisos y cubierta aterrazada.

  Pero, sin duda, lo más singular de él es la escultura que hay en su parte más alta. Un tigre de hormigón de nueve metros de longitud esculpida en 1942 por Joaquín Lucarini.

  En sus inicios el edificio fue ocupado por las oficinas y exposición de la empresa, y también parte fue alquilado a diversas industrias ligeras. Con el tiempo perdió esta función y fue restaurado y transformado en viviendas.

  Actualmente sigue sirviendo como hogares y su tigre se ha converrtido en uno de los símbolos emblemáticos de la ciudad.