jueves, 28 de noviembre de 2024

La capilla que custodió el Arca Santa

   Las ermitas se construyen en lugares algo alejados de las ciudades y sirven para atraer culto a más vecinos.

  A veces las iglesias solo son interesantes a nivel histórico-artístico y espiritual pero alguna también esconden leyendas y eso pasa con ermita o capilla de Santiago o de Arriba situada cerca del pico Monsacro, dentro del asturiano concejo de Morcín.

  Donde ahora se sitúa el templo se halla el Pozo de Santo Toribio de donde, según el mito, se sacaba tierra curativa. Es por eso que muchos peregrinos que iban a Oviedo posteriormente se acercaban a este lugar a llevarse los cardos milagrosos que crecen en su cima y tomar algo de tierra. El motivo de creer que este pozo es especial es que se dice que, tras la entrada de los musulmanes en ka Península, en él se guardaron el Arca Santa y otras reliquias venidas de Jerusalem que estaban en Toledo. Allí permanecieron hasta su traslado a la Cámara Santa de la catedral de Oviedo.

  Fue en el siglo XIII cuando se erigió esta ermita advocada a Santiago Apóstol (con anterioridad lo estuvo a Santa Catalina, Santo Toribio y Santa María) cuyo exterior es de piedra. Ahí se sitúa una puerta de arco de medio punto que da paso a una nave octogonal de lados desiguales de la que sale un tramo recto que da paso a un ábside semicircular (antiguamentedecorado con pinturas). Además ahí, bajo el altar, se halla el Pozo de Santo Toribio, la cueva del Ermitaño y un altar primitivo románico.

  En cuanto a su forma, muchos autores lo achacan a una vinculación con los templarios mientras que otros hablan de una adaptación a la cámara funeraria de un dolmen.

  Actualmente presenta un gran estado y gracias a su historia y leyenda está catalogada como Bien de Interés Cultural.



No hay comentarios:

Publicar un comentario