martes, 19 de noviembre de 2024

La iglesia de los juanistas de Cabanillas

   Cuando un lugar es repoblado se construyen lugares que satisfagan las necesidades de los nuevos vecinos.

  En la época en la que los cristianos y los musulmanes pugnaban por controlar el territorio de la actual España las tierras cambiaban de mano en muchas ocasiones, y con ello también la fe de los vecinos. Por esto es lógico que se levantaran templos que dieran sustento espiritual a los habitantes que allí habían llegado y un ejemplo de ello es la iglesia Parroquial de San Juan de Jerusalén ubicada en el navarro municipio de Cabanillas.

  En 1119 la zona Tudela y sus alrededores fueron conquistadas por el rey Alfonso I de Pamplona y Aragón, el Batallador. Tras ello se comezó un proceso de repoblaciónque se aceleró en 1124 con el Fuero de Cornago que otorgó el propio monarca. Los nuevos vecinos eran cristianos por ello se nesitaban iglesias y también de ejércitos que los protegieran. En 1142 el rey García Ramírez de Pamplona, el Restaurador, donó las localidades de Cabanillas y Fustiñana a la Orden de San Juan de Jerusalén para que encargara de tal fin, y así lo hicieron en 1189 cuando implantaron la encomienda sanjuanista y comenzaron las obras de esta iglesia, la cual culminó bien entrado el siglo XIII.

  Su exterior, de estilo romático, presenta una cabecera elevada sobre un prominente basamento y divida por tres paños separados por pilastras que hacia la mitad, coinciendo con una moldura, se convierten en semicolumnas culminadas en capiteles a la altura de las cornisas. Cada uno de estos paños tiene ventanales en arcos de medio punto y se decoran con fuguras geométricas, entrelazos, cruces o rollos que continúan por los demás muros. 

  En cuanto a la puerta, hay quien la cataloga como románica pero también hay fuentes que aseguran que es gótica pero con iconografía románica. Se tratan de tres arquivoltas sujetas sobre columnas acodillas repuestas y culminadas en capiteles. También contiene un guardapolvos con ménsulas-atlantes de las que salen crochets y ornatos vegetales.

  De ahí se pasa a un interior de una sola nave de dos tramos cubiertos por bóvedas de crucería de terceletes (fueron añadidas a finales del siglo XV o principios del XVI), arco triunfal apuntado, tramo recto presbiterial y ábside semicircular.

  Del resto de su historia se sabe que fue ampliada en varias ocasiones, fue abandonada y convertida en almacén durante mucho tiempo y que entre 1996 y 2001 fue restaurada por la Institución Príncipe de Viana (se arregaron los destrozos causados por la rehabilitación de 1904. En ella se cambió la portada de sitio y se añadió un tramo en el muro occidental por ello hubo que recuperar su estado anterior).

  Actualmente presenta un buen estado, hay un culto ocasional y desde 1983 es Monumento Histórico Artístico.



No hay comentarios:

Publicar un comentario